Me han explicado que la regulación hídrica tiene que ver con los humedales de alta montaña, que gracias a la composición porosa que genera la combinación de musgos y materia orgánica, permite crear una esponja que almacena una gran cantidad de agua por mucho tiempo, incluso años, y la suelta lentamente alimentando pequeñas quebradas y lagos, que luego alimentan ríos, que a su vez alimentan ciudades. ¡Todo un milagro de la naturaleza!